Kriyā Yoga es una técnica específica de meditación que pretende dirigir el prāṇa en el nervio central, también conocido como suṣumnā nāḍi Los linajes antiguos de los Naths, Shaivismo de Cachemira y Siddhar de Tamilnadu estaban muy familiarizados con la técnica de “respiración Sushumna” pero fue Sri Lahiri Mahasaya quien asumió la tarea de presentar, de una manera accesible a todos, esta técnica en su verdadera identidad y sus estructuras esenciales.
Desde la antigüedad, los rishis de India han investigado la relación entre el cuerpo sutil y la espiritualidad. Al igual que en la naturaleza las líneas rectas son extremadamente raras, en el cuerpo sutil casi ningún movimiento de prāṇa es en línea recta. De todos los miles de nadis, suṣumnā no tiene arcos ni curvas, esto revela su naturaleza inusual y sobrehumana.
La naturaleza divina y trascendental de suṣumnā se confirma por el hecho de que el prāṇa sólo llega a ser activo en este nervio cuando uno se dedica a actividades espirituales como la meditación y la oración. Reconociendo la estrecha relación entre la actividad de suṣumnā y la espiritualidad, Sri Lahiri Mahasaya arrojó luz sobre los intrincados laberintos de la filosofía y la práctica de los intentos del hombre para alcanzar la realización espiritual o Ānanda (gozo).
Para Sri Lahiri Mahasaya, el nervio central de suṣumnā – que está contenido en cada criatura viviente – fue el único y verdadero camino espiritual, el secreto de los más audaces logros espirituales del alma y de sus admirables ascensiones místicas. Buceando constantemente en el dinamismo interno de la “respiración suṣumnā”, el kriyavan pasa por varias etapas de crecimiento hasta que el flujo de prāṇa se vuelve predisposición inmediata al inefable kevala kumbhaka, es decir, cuando el prāṇa fluye dentro de suṣumnā nāḍi sin tomar aire el exterior.
Cuando la conciencia y el prāṇa fluyen a través de suṣumnā, la mente experimenta paz y gozo. Manas (la mente) comienza a experimentar Cidākāśa – el espacio interior – y se convierte en uno con él (Kaivalya). Esta es la primera etapa de Samadhi. Una intoxicación divina ocurre en la columna vertebral y el cerebro. La postura (asana) se vuelve firme y khecarī mudrā puede llegar a ser muy estable. Se percibe el Aum o el Bindu Nada. Los 6 chakras comienzan a aparecer en suṣumnā.
El flujo de prāṇa en suṣumnā conlleva varias visiones de Cidākāśa- un dormitorio, una cueva, un salón, un túnel, el cielo, bhramara-guha (por favor lee http://lahirimahasayakriyayoga.org/ajna-chakra-and-superconsciousness/), Kūṭaṣtha (la luz de la Conciencia Pura), animales (el elefante en el chakra muladhara, el caimán en svadhisthana, etc.) y varios Devas y Devis.
Es precisamente dentro de Cidākāśa – en el espacio interior del chakra ājñā – que culmina el viaje fascinante hacia el interior de suṣumnā. Aquí es donde el kriyavan experiencia Bindu Nada (punto de sonido en el corazón de ājñā). Al principio, los sonidos internos son de una gran variedad y son experiencias aisladas. Pero cuando progresas en la práctica, el sonido se hace cada vez más sutil. Una vibración sonora se siente inicialmente en el pasaje de suṣumnā, y luego se escucha el sonido claro en Bindu Nada. El sonido Om que se escucha es largo, continuo, uniforme, cautivante y atrae a la abeja de la mente como el néctar. Mediante la fusión de la mente con Bindu Nada, se alcanza Paravastha.
La presencia de prāṇa en suṣumnā es responsable de la visión brillante de Kūṭaṣtha. En el estado de Cidākāśa, si la atención se fija en bhrumadhya o en el espacio que se ve en los párpados interiores ante los ojos, la Luz se convierte en visible para ti. Los informes que describen cómo aparece esta Luz son innumerables. A veces Cidākāśa aparece iluminado – como un cielo sin nubes, un compartimento brillante, etc. – y esta es también una experiencia de Kūṭaṣtha. Al principio, las experiencias con Jyoti son muy esporádicas y de corta duración. Trata de ser testigo de la visión de Kūṭaṣtha continuamente independientemente de si continúa o desaparece. Mediante la fusión de la mente con Kūṭaṣtha, se alcanza otro grado o calidad del Samadhi.
La Unión de la mente con la Luz interior (Kūṭaṣtha) y el Sonido (Nada) que ocurre en la dimensión de Cidākāśa, es la joya de la corona de Kriyā Yoga. El Kriyavan inteligente siempre debe meditar sobre su Ātman dentro de la cámara oculta de Cidākāśa y también tratar de conseguir la Unión del ser con la luz y el sonido. Porque sólo cuando Sat (Ser) y Cit (conciencia) se unen, se alcanza la bienaventuranza del Nirvikalpa Samadhi. De esta manera, Cidākāśa se convierte en Hṛdayākāśa, el espacio del centro del corazón donde el kriyavan puede sentir la unidad con Brahman dentro de uno mismo (ātman) – yo soy espíritu, aham brahmasmi – en el cual no hay el menor rastro de la dualidad, y la realización (Siddhi) es completa.
¡Muchas bendiciones, paz y felicidad!
Autor: Yogui Profesor Ramdas Prabhuji, del linaje de Shri Panchanan del Kriya Yoga de Lahiri Mahasaya.
Lovingly Translated into Spanish: Traducción: Leandro Lacunza
Thanks Leandro Lacunza for Your Contribution to Lahiri Mahasaya Kriya Yoga Community !
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